Dos años y medio han pasado desde que la
Plataforma en Defensa del Río Henares puso en marcha la acción vecinal para rechazar el muro de hormigón que se marcaron ilegalmente los gestores municipales en pleno Lugar de Importancia Comunitaria (LIC).
A lo largo de estas primeras semanas de primavera del 2013 también está teniendo lugar la siembra de libros gracias a la
biblioteca libre del Henares.
Durante ese otoño de 2010 se acometió una retirada parcial del muro, su aspecto fue maquillado hasta como lo conocemos hoy día. Hace un par de meses, un vecino asiduo de este paseo del barrio de Nueva Alcalá colocó estos dos carteles de advertencia para ciclistas, un ejemplo en pro del civismo y la preferencia peatonal.
El Paseo del Henares es un tramo incluido dentro de la
red de carriles bici, representa junto a la "acera bici" del Paseo de Pastrana, los únicos tramos "ciclables" de un barrio encajonado a consecuencia de la planificación urbanística además de su alto índice de tráfico por la Ronda Fiscal y el propio Paseo de Pastrana, que recogen una Intensidad Media Diaria (IMD) en sus viarios de 25.389 y 12.000 vehículos a motor respectivamente según las mediciones del Plan Director Ciclista.
La normativa estatal actual indica que los ciclistas únicamente pueden circular por espacios peatonales siempre y cuando los mismos cuenten con cuatro metros de anchura total o al menos tres metros libres de mobiliario urbano a una velocidad menor de 10km/h. Las bicicletas deben circular únicamente cuando no existe aglomeración, pudiendo conservar un metro de distancia entre los peatones y ciclistas que circulan para acometer un adelantamiento, mientras resulte posible circular en línea recta más de cinco metros de manera continuada.
El Paseo del Henares no reúne en algunos tramos estos requisitos en infraestructura, siendo una de las circunstancias que limitan los índices de seguridad entre viandantes y biciclistas.
Asimismo, muchos peatones y ciclistas asiduos de esta zona comentan lo habitual que resulta encontrar ciclistas que infringen el sentido común de convivencia en un espacio ya de por sí reducido.
Es probable que estos carteles hayan desaparecido en apenas dos semanas por causas que tengan una relación con las carencias de un número de ciclistas que no reparan en co-habitar junto a los usuarios más legítimos y expertos en el tránsito poblacional, los peatones.
Disculpa por la metedura de pata, no me he expresado correctamente y para colmo he borrado sin querer tu comentario "¿la normativa estatal recoge que los ciclistas únicamente pueden circular por espacios peatonales?
ResponderEliminarLo he corregido por: "la normativa estatal actual indica que los ciclistas únicamente pueden circular por espacios peatonales siempre y cuando los mismos cuenten con cuatro metros de anchura total o al menos tres metros libres de mobiliario urbano con una velocidad menor de 10km/h"
Siento el malentendido
Un saludo y gracias, Zori Maco